

El desafío del Derecho Penal Internacional: El juicio a las grandes potencias.
Desde la II Guerra Mundial, el Derecho Penal Internacional avanzó para juzgar crímenes de guerra y lesa humanidad. Sin embargo, las grandes potencias —muchas fuera del Estatuto de Roma o con poder de veto en la ONU— siguen siendo prácticamente intocables. El desafío actual es lograr una justicia internacional sin excepciones, donde ningún Estado esté por encima del derecho ni exento de rendir cuentas.